El silencio, el espacio vacio no tiene porque ir unido a la tristeza.
En ocasiones todo lo contrario.
Y puede demostrar tanto...
Mostrar las personas que están a tu lado.
Espacios huecos llenos de alegría,
algo que parece contradictorio pero que para nada lo es.
A ver quién se atreve a tomar mi gratitud por esa compleja demostración...
Hoy miro por la ventana,
llueve
y sonrio aunque tenga un hueco dentro de mi.
Nada he perdido,
lo que había en ese espacio vacio está al cobijo.
Al calor de los atrevidos.
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